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domingo, 2 de abril de 2017

Buenos días. Osadía 72



Atrévete a darte. 

Buenos días.

viernes, 30 de mayo de 2014

Buenas noches. Tiempo




El amor tiene que ver, sobre todo, con el tiempo. Amar es dar, pero no tanto dar cosas, ni dinero, ni palabras, sino dar tiempo. Se trata de darle a la persona amada el tiempo que tenemos para vivir nuestra propia vida. Es la única manera, no de dar, sino de darse. Te quedas sin tiempo. Te quedas sin vida, pero, paradójicamente, así descubres la felicidad. Buenas noches.

lunes, 7 de abril de 2014

Buenas noches. ¿Y nosotros?




El aire se nos ofrece para que tomemos de él el oxígeno que necesitemos. El agua da de sí lo mejor que tiene para intentar quitarnos la sed y refrescarnos. El Sol nos da su luz todos los días, con sus horarios y sus nubes, pero acude todos los días en nuestra ayuda. El arte nos da siempre lo mejor que tiene para hacernos la vida más agradable. Las flores en el jardín no nos cobran por verlas, por olerlas el tiempo que queramos. La Naturaleza y la vida se nos dan siempre con su mejor intención. ¿Nos damos nosotros así? ¿Nos regalamos nosotros así? Buenas noches.

viernes, 24 de enero de 2014

Buenas noches. Darse





Sólo ella parecía amar. Sólo ella parecía saber amar. El resto amaba mal, quizás porque no sabía amar o porque necesitaban más ser amados que amar. Uno tenía buena voluntad, pero prefería imponer sus criterios y se olvidaba de que el amor debe buscar que la persona amada pueda ser en la vida como ella misma quiera ser, no como el que ama quiere imponer. Otro sufría las consecuencias de vivir entre un posible amor ausente y añorado y otro presente y agobiado. Otra se debate entre alguien de quien tiene una dependencia sexual, pero con quien es imposible vivir, y alguien con quien vive, pero al que no quiere. Posiblemente se creyera que amor es igual a sexo y que sexo es igual a amor y no acaba aún de descubrir que no es así. Otro es demasiado simple para poder amar, demasiado lejano para que alguien se pueda sentir querido por él. Todos parecían frustrados. Todos aparecían como proyectos sin sentido, desprovistos de la menor racionalidad. Todos parecían necesitar amor, pero ninguno amaba ni sabía cómo hacerlo.Todos parecían tener los muebles revueltos en la cabeza y ésta levitando en algún mundo irreal. Sólo ella sabía que amar era cuidar del otro, ayudar a crecer al otro, dar su propio tiempo, dar su propia libertad, dar, darse.

Ella es Emilia, la protagonista de la obra que se representa hasta el 9 de febrero en los Teatros del Canal, de Madrid.

Buenas noches.